Errores en la osteosíntesis en fractura de laterales de cadera
¿Qué es la osteosíntesis?
Conocida como fijación interna, la osteosíntesis es la técnica que tiene el objetivo de unir partes óseas rotas o separadas mediante el uso de piezas de acero inoxidable, titanio o polímeros absorbibles. Dependiendo del grado de la lesión, el médico encargado determinará si es necesario extraer la prótesis o mantenerla instalada.
Desde su invención en 1949 de la mano del doctor Robert Danis, la osteosíntesis ha evolucionado, mejorando los procedimientos y los materiales que se usan en la fabricación de las prótesis. No obstante, esto no le libra de posibles fallas y errores. A pesar de que se ha reducido el riesgo de mortalidad con el paso del tiempo aún quedan mejoras por hacer.
El uso de las placas o tornillos para acoplar nuevamente piezas óseas desunidas ha demostrado eficacia y confiabilidad entre la comunidad médica y pacientes. No obstante, estos resultados no le quitan la eficacia. Según los estudios realizados por la Asociación Argentina de Ortopedia y Traumatología, las fallas varían según la posición del hueso y las fallidas instalaciones que al principio parecen exitosas, pero con el paso del tiempo llega a perjudicar a la vida del intervenido.
Estadísticas
En Estados Unidos, la cifra de fracturas laterales de cadera contabilizaba unos 250.000 casos durante la década de 1990. Según la Organización Mundial de Salud, para 2040 la cifra llegará a 500.000 personas. En Latinoamérica, Argentina registro 20.000 casos de este tipo de lesión lo que nos da una idea de cómo es la situación en los países vecinos. La tasa de mortalidad llega a 20-30% en adultos mayores, influenciada más que nada por factores externos, como el socioeconómico o el estado mental de las personas. Aunque las fracturas no son consideradas un problema de salud pública, el sistema de salud de cada país debería tratar seriamente estos casos y especializarse para ayudar a las personas que no son capaces de adquirir prótesis de metal.
Problemas y errores desapercibidos
En los primeros años de la osteosíntesis, allá por la década de los 60, los prototipos de las piezas metálicas que usaban en las operaciones causaban problemas de desplazamiento e inhabilitaban el movimiento de la pierna por su mala aplicación en el hueso. Ya en los 90, el material de los clavos fue cambiado por un acero especializado para uso medicinal mejorando la estabilidad de los pacientes.
Sin embargo, a pesar de tener la tecnología y los avances que optimizaron las mejores ortopédicas, el factor humano influye mucho, y no solo de parte del cirujano que operó, sino del organismo, la posición y el sistema ósea del paciente que puede llegar a perjudicar su propia recuperación y adaptación.
Aunque son casos muy reducidos en el que, el paciente pone en riesgo su vida, los investigadores deben tratar de encontrar la manera de clasificar los huesos de cada paciente para realizar operaciones exitosas.